

(13)
(14)
(15)
(16)
ROCHAS, F., «Precariedad del empleo y riesgo de pobreza» en
Gaceta Sindical
, núm. 28,
2017, págs. 196 y ss.
OIT,
Informe Mundial sobre Salarios 2018 / 2019. Qué hay detrás de la brecha salarial de
género
, Informe anual sobre salarios, 2018.
No es comparable lo que se entiende por límite adecuado de ingresos en los países ricos
y los más pobres, los primeros a veces superan incluso a lo que se entiende como rentas
medias en los últimos. Esto es, existe una importante brecha salarial entre los distintos
Estados. Vid. MILANOVIC, B., «La desigualdad de los ingresos en cifras: en el pasado y
ahora. Una visión general»,
Gaceta Sindical
, núm. 26, /2016. págs. 132 y ss.
OIT,
Informe Mundial sobre Salarios 2016 /2017 La desigualdad salarial en el lugar de
trabajo
, 2016, págs. 26 y ss.
lo excluye radicalmente. Si con anterioridad se partía de la idea de que eran
los desempleados por definición quienes se encontraban en una situación de
exclusión social, hace un tiempo que ha surgido una nueva categoría, que
viene a desarmar este principio. Se trata del trabajador o, el más usual, la
trabajadora, pobre, entendiendo por tal aquel que, aunque desarrolla activi-
dad laboral, sin embargo, viven en hogares cuyos ingresos están por debajo
del umbral de la pobreza
(13)
.
En general, la tendencia de los salarios a nivel mundial es de crecimiento
lento, incluso en los países que se han recuperado de la última crisis econó-
mica y han reducido su porcentaje de desempleo. De hecho, es significativo
igualmente en los Estados con ingresos más altos, sin que la evolución retri-
butiva se corresponda con el aumento de la productividad. Además, en los
Estados más pobres, donde existe más desigualdad salarial, también es espe-
cialmente significativa la brecha de género
(14)
. De modo que la conclusión
desde esta perspectiva es negativa en general en todos los países, de forma
que se puede afirmar que no se está colaborando con la idea de la consecu-
ción de un trabajo decente y sostenible para todos y todas.
El reto fundamental en este ámbito es identificar dónde está el límite de
la precariedad. Obviamente es complicado determinar una cuantía, puesto
que también depende del coste de la vida de cada país, sin que sea posible
extrapolar estos importes a Estados de diferentes continentes. De forma que
es imposible determinar un único límite de precariedad mundial, ni siquiera
por economías similares
(15)
. Quizás es en este punto donde es más compli-
cado determinar unos estándares mínimos.
Uno de los instrumentos para luchar contra la desigualdad salarial es la
determinación de un salario mínimo, junto a las medidas fiscales, que actúe
como umbral de remuneración decente
(16)
. Otra cuestión es determinar cuál
será su límite. Si se centra el análisis en Europa en 2018 se puede dividir los
distintos salarios mínimos en países con un alto rango (más de 1450 euros)
El futuro del trabajo en España: impacto de las nuevas tendencias
100